
Finalidad: Exponenciar la capacidad imaginativa en el Orador en el momento de sus exposiciones.
Metodología: En una habitación silenciosa y tranquila, cómodamente sentado y con los ojos cerrados, imagine una escena ficticia, por ejemplo, el ir en medio del mar en un barco, o ser parte de una caravana que atraviesa el desierto, o ir en excursión a subir una montaña. Trate de percibir las sensaciones que sentiría en tal situación, por ejemplo: calor, miedo, ansiedad, etc., y en voz alta vaya describiendo lo más detalladamente posible su experiencia.
Beneficios: Este ejercicio permite que el Orador utilice su imaginación al máximo y vaya siendo capaz de mejorar la descripción de sus emociones.
Ejercicios básicos para la práctica de la Oratoria
Por: David Chamorro Zarco, reconocido muñozcotista.
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